lunes, 9 de agosto de 2010

Parole

Por primera vez, no quiero definirte o categorizarte, o guardarte en una cajita o saber siempre dónde encontrarte. Sí quiero subirme a ese tren, buscarte, bajarte del estante, ponerte en un papel de regalo azul, desenvolverte, mirarte.

Mirarte cuando te subas a tu bicicleta un día de lluvia, que me cuentes qué te hace soñar y que te sonrojes con mis piropos.

Que rías a carcajadas, que te rías de mí y de mis cajitas, y que me enseñes a hacerlo con vos. Que cantemos debajo de esa lluvia y escuchar tus declaraciones de principios una y otra vez, cerrar los ojos para no ver las ranitas, y tomarme de tus manos para volver a soñar, y soñar.

Sos sorpresivamente real para mi mundo al que serás siempre bienvenido.

(Y dicen que así se siente la vida)  

1 comentario:

La Cruel risa de Dios dijo...

Imagenes perfectas, una poesía de momento, de instante en el tiempo. Un piropo largo, hasta en la música. Me encanta. Algunas veces cuando la sensación es tan clara, ponerla en palabras decepciona. Me EN-CAN-TA.